Tambores de sacrificio

Es necesario desintoxicarse del largo pasado que nos ha anclado en el mar de las grimas, no con gritos ni pidiendo ayuda, si no contemplado la realidad que nos toca en el ahora.

La única manera de ganar las batallas que la sentencia al nacer a decretado, es sabiendo caminar  primero y cabalgar de adultos por largos y oscuros bosques,  en búsqueda del fruto de la sabiduría que otorga la llave al futuro.

En el silencio podremos proteger las palabras , en el dolor podremos escapar de la felicidad y en las caídas se podrá encontrar la excusa perfecta para no caminar. El comienzo de cada camino depende del tiempo que pudimos permanecer de pie, pero las armas que hemos ganado depende de cómo nos hemos levado.

Los cantos de la melancolía de la noche , las cuevas de la luna templos de secretos y vacíos del conocimiento y de la magia que alberga la resistencia de la existencia de vivir.

Largos senderos que nos atrevimos a trascender que callamos y jamás revelaremos  su subsistencia en el tiempo, de lo que nunca podremos ser.

El  único poder de destruir que poseemos dentro de nuestra alma condenada a una vida mundana sin aspiraciones , recorridos y giros que damos para no encontrarnos con nuestro reflejo y a medida que el tiempo nos va ganando vamos cayendo más lejos.

Ojos como cuencas que ven a través el agua , la niebla y el fuego del mismo infierno , como espada una lucha y como guerra los pensamientos …  Pero nuestro peor enemigo sin duda el mismo angel caído.

Nunca sabremos cuando se termina, mucho menos sabemos cuando comenzamos, vemos muchas almas iguales , pero nos alejamos cuando ya han terminado su irrealidad sobre la tierra. No pueden ayudar, no pueden cabalgar y nunca llegaran … es necesario su sacrificio para evitar la agonía del final.

El hielo que nos envuelve , el fuego que nos apasiona y nos extermina , un ave que renace el mismo día.

Los tambores del sacrificio , las flechas que atraviesas la distancia del espacio  y tiempo , las horas que se estancan , las miradas se congelan , las hojas caen y el pañuelo rojo envuelve a las aves para evitar su vuelo .

No quiere dejar que escapemos , debemos permanecer de pie , no hay peor escape que huir y no hay peor derrota que intentar.

Sus manos se agarran de nuestros pies ,  nuestras manos se aferran al cruel destino, todos quieren salvarse al cortarse el hilo.

Puedo sentir las hojas debajo de mis pies , el calor en mi pecho y el frio en mi alma, no hay nadie todo quedo atrás, el tiempo que murió se los llevo.

Las fuerza son las cadenas que no deben romperse, aunque nos estén devorando los mundanos, el ser mágico nos salvara fue su promesa de fe , su sacrificio y su condena .

Todos condenados a un mismo destino.

Los que encontramos no son amigos , no son salvaciones, no son la trompeta de la libertad ni el canto de un angel , son olvidados igual que nosotros, que el reflejo que olvidamos en el espejo , que la risa que olvidamos emitir al despertar.

Las puertas se abren cuando caemos a la realidad, puertas que nos guían , ventanas que nos ayudan a observar por donde vamos, creaciones que se cruzaron en nuestro andar.

No nos dieron alas , pero si un alma , porque esa ave vuela pero esta lejos , pero podemos seguirla y verla , pero jamás tocarla ¿es real?...

Que es sentir si no podemos tocar? , que es amar si el pensamiento nos domina , de que esta hecho el corazón si no brilla? ¿ qué es existir?.

En el olvido comienza el final de la historia que deseas liberar…

JAMAS ME ATRAPARÁ POR QUE NO INTENTO HUIR…yo no la cree . ella me creo a mi...